Mayores recursos al MEPCO

n una mirada de mediano plazo, en base a consideraciones ambientales, el país debería modificar la política tributaria aplicada a los combustibles fósiles, de manera de desincentivar su uso a través de impuestos más altos y parejos. En ese sentido, puede parecer contradictorio duplicar los recursos que se aportan al mecanismo de determinación de precios del combustible (MEPCO) -como ha propuesto el gobierno-, ya que en la práctica ha terminado operando en general como un subsidio. Sin embargo, dado el contexto actual, parece razonable hacerlo, sin abandonar la idea de racionalizar la política de precios de combustibles en el futuro, buscando fomentar el uso de tecnologías más limpias.

Habría que mencionar primero que la importante alza del precio del petróleo se ha dado también para otras materias primas, como el cobre, por lo que no se espera un deterioro de los términos de intercambio. Sin embargo, para la población en general el aumento del precio del petróleo tiene un impacto negativo directo, y no ocurre lo mismo con el beneficio que recibe el país por el mayor precio del cobre, que sí impacta en forma muy positiva en las arcas fiscales . Aunque esos mayores ingresos del cobre deberían ser ahorrados producto de la regla de balance cíclicamente ajustado, parece razonable que una parte sea utilizada para atenuar el impacto del alza de los combustibles en las familias y empresas.

Existe otra razón adicional para justificar esta política, relativa al problema inflacionario que enfrentamos, y que se ve agudizado por este shock petrolero. La inflación impacta en mayor medida a los sectores de bajos ingresos, y por lo tanto, si el MEPCO contribuye a atenuar las presiones inflacionarias, los recursos utilizados en el proceso contribuyen especialmente con los grupos más vulnerables.

En definitiva, si bien hay tarea pendiente en mejores políticas de tributación y estabilización de precios de combustibles, las complejidades de corto plazo hacen recomendable sumar estos recursos adicionales al MEPCO. Es de esperar que estos aspectos sean considerados en el pacto tributario que busca el gobierno.